Quemar (o no) aceite: la nueva polémica técnica de la F-1
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Luego que la Comisión Técnica de la Federación Internacional del Automóvil (FIA, por sus siglas en francés) determinó en junio pasado, antes del Gran Premio de Azerbaiyán (octava prueba del Campeonato del Mundo de Fórmula 1) que los fabricantes de motores de la categoría solo podían usar aceite con intención lubricante, los responsables de las empresas Mercedes-Benz Motorsport y Ferrari lograron revertir esa decisión para el GP de Hungría de hace una semana, añadiendo nuevos episodios a esta polémica.
La directriz técnica aplicada por la FIA a partir del pasado GP de Hungría establece la posibilidad de consumir hasta 900 cc de aceite por cada 100 km recorridos, equivalentes a casi 3 litros por cada carrera (cuyo recorrido máximo está en torno a los 305 km). Este aceite-combustible se añade a los aproximadamente 134 litros (100 kg exactos) de gasolina que impone usar el Reglamento por carrera.
Además de aumentar la capacidad de combustible en casi 3%, el aceite usado como combustible tiene cualidades “aditivas” en vista que aumenta el rendimiento energético y el poder detonante del combustible que usa cada motor, obviando la norma técnica que impone que un motor de F-1 debe consumir combustible de uso comercial.
La norma de la FIA fue consecuente a los alegatos de Mercedes-Benz y Ferrari, quienes afirmaron y demostraron que sus unidades de potencia no pueden funcionar sin ese aceite añadido como combustible sin sufrir consecuencias como pérdida de rendimiento, aumento del consumo y pérdida de fiabilidad.
Varios medios señalaron que los técnicos de Ferrari y Mercedes-Benz se mostraron de acuerdo con la prohibición del uso del aceite como combustible, pero no en forma inmediata, sino gradual. La negociación impuso un límite legal de 0.9 litros/100 km hasta el final de la temporada y una reducción a 0.6 litros/100 km a partir del próximo año.
Los voceros de la FIA señalaron que la tolerancia de 0.9 litros/100 km fue establecida al medir el consumo de aceite de las unidades de potencia Mercedes-Benz y Ferrari en las primeras diez pruebas del calendario.
La medida, si bien beneficia claramente a Mercedes-Benz y Ferrari sobre Renault Sport Racing y Honda Motorsport, habría tenido mayor cantidad de efectos positivos sobre Ferrari, que pareció más comprometida que Mercedes-Benz en las carreras posteriores al GP de Azerbaiyán, en Austria y Gran Bretaña cuando se impuso la prohibición ahora derogada y perdió algo de rendimiento frente a sus rivales alemanes.
Marcin Budkowski, el Delegado Técnico de la FIA, no ha emitido declaraciones públicas oficiales tras divulgarse la decisión federativa, pero parece entendida su intención de seguir adelante con el caso. Tampoco han surgido declaraciones oficiales inmediatas de Renault Sport Racing y Honda Motorsport, quienes podrían en las próximas carreras aprovechar la tolerancia en el consumo de aceite para mejorar el rendimiento de sus unidades de potencia en consecuencia con la posibilidad de usar aceite como elemento combustible. (Flash del Motor).