Fernando Alonso tuvo un complejo debut en prototipos
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El piloto español Fernando Alonso completó una complicada actuación el pasado fin de semana al participar con uno de los autos del equipo United Autosport en la carrera de 24 horas realizada en el óvalo de Daytona, en la apertura del Campeonato norteamericano IMSA para autos deportivos.
Alonso, acompañado por el prospecto británico Lando Norris y el joven norteamericano Phil Hanson en un prototipo Ligier JSP2 de la clase LMP2, no rodó mucho en ensayos libres, ni en calificación, pero tras tomar la largada en 13o lugar, mantuvo un ritmo parecido al de sus jovenes compañeros quienes también estaban conociendo la prueba y la categoría, pero no tenían su experiencia, ni habían podido probar el carro antes que llegara a Daytona.
Antes de la carrera, Alonso quitó importancia al hecho de calificar tan atrás y no haber dado demasiadas vueltas, afirmando que había sido la calificación “menos importante de mi vida”.
En carrera, el auto de United Autosport designado con el número 23, sufrió un prematuro retraso inicial cuando Phil Hanson -al igual que varios otros participantes- tuvo un pinchazo, que dañó varios elementos aerodinámicos.
Un relevo sin incidencias de Alonso, un veloz turno de Norris y un buen relevo de Hanson, regresaron al carro al grupo de los ocho mejores, cuando llegó la noche y con ella un nuevo turno de Alonso al superar la 8a hora.
Inmerso en el tráfico nocturno y guiando con luces artificiales, Alonso fue rápido mientras tuvo pista libre, pero al alcanzar a los autos más lentos descubrió que -a diferencia de la Fórmula 1- en IMSA nadie se aparta para dar paso a otros pilotos. Alonso tuvo varias maniobras comprometidas con los doblados, que le obligaron a abusar de sus frenos, provocando hacia la 11a hora una avería general del cilindro maestro de una de sus ruedas, que le exigió regresar lentamente al box poco antes de terminar su turno.
Tras perder en la reparación una veintena larga de vueltas, el trío formado por Alonso, Norris y Hanson marcó cronos interesantes, pero ya no podían optar a un puesto entre los cinco primeros y al triunfo en la clase LMP2. Más tarde, la avería de frenos resurgió y apareció otra avería en el acelerador, que hicieron al carro perder aún más tiempo, quedando en 38o lugar.
Durante el fin de semana en Daytona, Alonso recibió más o menos el mismo interés de los organizadores y público presente que recibieron otros pilotos de alto nivel. Su presencia esta vez careció de la relevancia mediática de su debut en Indianápolis 500 en 2017 y el asturiano se desplazó antes de la carrera hasta Charlotte, a fin de participar en la presentación pública del Campeonato NASCAR, donde se hizo ver junto a la gran estrella de esta categoría, Jimmie Johnson.
En sus declaraciones para medios españoles y de habla hispana, Alonso insistió en separar su actuación en Daytona de cualquier expectativa en torno a resultados, afirmando que su único objetivo era divertirse. Antes de la carrera, el español había generado expectativas al afirmar que eran más fuertes de lo que parecía, pero al exponer sus proyecciones señaló que su auto era menos competitivo que los Oreca LMP2 y al final de la competencia, tras lamentar el problema con los frenos, afirmó haberse divertido al estar superando autos en forma constante.
Antes de la competencia, los miembros de United Autosport desecharon cualquier expectativa de que alguno de sus dos autos luchara por la victoria, situando sus proyecciones en entrar en el top 5 y respaldando a los especialistas locales, quienes señalaron que considerando la calidad de los autos y el equipo, luchar por ganar la división LMP2 debía ser un objetivo fácil de concretar, tal como hizo la unidad gemela tripulada por Bruno Senna, Paul Di Resta, Will Owen y Hugo de Sadeleer, que terminó 4a absoluta.
Ya cumplido el compromiso profesional en Daytona, Alonso atenderá varios compromisos con patrocinadores y con su marca de ropa deportiva antes de regresar a Europa a mediados de semana.
Antes de abandonar el Daytona International Speedway, el español se describió complacido con la sensación de ser competitivo y al competir junto con los mejores nombres del automovilismo deportivo norteamericano.
AL 50% LAS POSIBILIDADES DE ALONSO PARA IR A LE MANS EN 2018
El piloto Fernando Alonso reconoció el pasado fin de semana en Daytona, EEUU, estar negociando la posibilidad de competir en la carrera de “24 Horas de Le Mans” a realizarse el próximo mes de junio en Francia, pero añadió que todavía no es posible confirmar que pueda ocurrir en el 2018.
“No es un secreto que tengo interés en ir a Le Mans. Ya lo he dicho antes y forma parte del objetivo de conseguir la “triple corona”, así que definitivamente iré, pero no sé exactamente cuándo. Si no pudiera ser este año, seguramente el próximo, o luego…”, dijo el español en declaraciones que desde el pasado viernes han reseñado varios medios.
En sus afirmaciones, Alonso no dio detalles de las negociaciones y del equipo – o equipos – con los que está negociando, pero añadió que “tal como están las cosas, diría que los chances están 50/50%. Hay que combinar algunas cosas aún, pero estamos tratando de hacer todo lo posible. Espero que la respuesta sea positiva, pero tan pronto sepamos si es o no positiva, les haremos saber”.
Se da por descontado que la única alternativa que intenta Alonso para competir en Le Mans este año es a través del team oficial Gazoo Toyota Racing, pero el asturiano podría formar parte con United Autosport de un proyecto similar al que este fin de semana le hizo competir en Daytona a fin de formar parte de la clase LMP2, o ser parte de un hipotético retorno de McLaren a las carreras del Campeonato del Mundo de Resistencia (WEC, por sus siglas en inglés) si los ingleses quieren confirmarse en ese sentido luego de anunciar recientemente su regreso al deporte a motor con su participación oficial en el Campeonato Británico de autos GT, con un MS670 GT4.
La hipótesis más consistente señala que Alonso, a través de un pool de patrocinadores, hizo una oferta financiera a Toyota, a fin de integrar el equipo de seis pilotos que conducirán los dos carros que la marca inscribirá en Le Mans. Hasta ahora los japoneses han afirmado que su deseo es emplear en Le Mans a los mismos seis pilotos que le representarán en la temporada 2018/2019 del WEC y que ya tiene bajo contrato, pero las especulaciones incluyen que Toyota acepte al español e inscriba cuatro pilotos en uno de sus carros. (Flash del Motor).