El Mini 1275C del Rey Juan Carlos saldrá a subasta y se trata del único auto que ha tenido a su nombre
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La nota la tomamos del portal ‘Coches de hoy’. Y además de curiosa, seguro que es de interés para los coleccionistas:
“Se dice que un vehículo pierde valor desde el mismo momento en el que sale del concesionario, pues, al perder la condición de “sin estrenar” se convierte inmediatamente en un vehículo de “segunda mano”.
Esta premisa se mantiene constante en todos los casos salvo en uno, que el propietario del vehículo sea un personaje famoso, o en su defecto, haya participado en un evento de gran repercusión, como una película o una serie de televisión.
En este sentido, a comienzos del mes de febrero les contábamos que el Papa Francisco había subastado el Fiat 500L con el que había pasado su estancia en Philadelphia por un total de 82.000 dólares, cuatro veces más que su precio original de fábrica.
Ahora, es otra celebridad, como Don Juan Carlos, Rey de España durante 39 años y que fue uno de los grandes artífices del tránsito hacia la democracia, el que subastará uno de sus vehículos, aunque eso sí, no será él el que lo haga, sino su actual propietario, un español llamado Pedro Molina que desea aprovecharse de su gran valor histórico para obtener mucho más de lo que en su día costaba.
El vehículo en cuestión es un Mini del año 1969 y modelo 1275C, y está considerado como el único vehículo que el padre del Rey Felipe VI, ha tenido a su nombre y que en su día fue modificado por el propio monarca tanto en el apartado de diseño (interior y exterior) como en el apartado técnico.
Al respecto, Don Juan Carlos pidió que modificaran su Mini con un doble carburador, un radiador de aceite y depósito de combustible suplementario situado en el maletero, y un sistema de servofrenos, con todo ello logró que el Mini pudiese correr el doble de kilómetros sin detenerse a repostar.
Actualmente cuenta con 76.487 kilómetros recorridos, de los cuales los primeros 15.000 los habría realizado el propio Don Juan Carlos cuando tenía apenas 31 años y llevaba apenas siete años casado con su actual esposa, Doña Sofía, por lo que tanto las infantes como el actual Rey de España ya habían nacido.
El vehículo tiene un motor de 1.275 cc y posee una potencia de 59 caballos, una cifra que era muy interesante en la época en la que fue comprado. Su actual propietario asegura que en alguna ocasión ha llegado hasta los 180 kilómetros por hora y según sus cálculos podría alcanzar los 200 kilómetros por hora si se añadiese una quinta marcha (actualmente posee cuatro).
En su día, cuando aún era príncipe, Don Juan Carlos compró el vehículo por 100.000 pesetas actualmente su valor ha aumentado considerablemente, aunque hasta que terminen las subastas no se conocerá el montante total al que ascenderá el viejo Mini del antiguo Rey de España. (Flash del Motor).
Al rey le costó 100.000 pesetas, cuando era Príncipe y ganaba 70.000 al mes. Es el único coche que ha tenido registrado a su nombre
“Me he divertido mucho con este coche por las calles de Madrid”, le confesó el Rey a Pedro Molina, su actual dueño y que ahora lo pone a la venta. (Flash del Motor).