Ford prepara el campo de Brasil para probar vehículos autónomos
Las inversiones involucran digitalización, detección de carril e instalación de antenas 5G, según un informe de Auto Industria.
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Ford anunció esta semana nuevas acciones en el área de investigación y desarrollo, que viene fortaleciendo desde principios del año pasado, cuando suspendió por completo sus operaciones de fabricación en Brasil. Después de ampliar el número de ingenieros en el Centro de Desarrollo y Tecnología de Camaçari, BA, ahora le toca al Centro de Tatuí, Sao Paulo, recibir nuevas inversiones.
Sin revelar valores, revela nuevas acciones en la digitalización de la operación del interior de São Paulo, así como en la detección de pistas e instalación de una antena 5G para probar vehículos autónomos en el lugar, que existe desde hace 40 años y también tiene laboratorios que cumplen con los estándares mundiales y requerimientos del sector.
“Ford es la única empresa en América Latina que tiene una estructura completa de desarrollo y pruebas automotrices integrada con un equipo de ingeniería local con capacidad para desarrollar vehículos globales”, comenta Alex Machado, director de desarrollo de Ford Sudamérica.
Conocido como Campo de Pruebas de Tatuí, el sitio pasó a llamarse Centro de Desarrollo y Tecnología, el mismo que se utiliza en la unidad de Bahía, que alberga a más de 1.500 ingenieros, de los cuales 500 fueron contratados este año.
Además de trabajar en pruebas, validaciones y aprobaciones de modelos en la cartera actual, tanto para Brasil como para América del Sur, los profesionales locales de Ford también participan en proyectos globales, incluidas las tecnologías de movilidad del futuro que aún llegarán a las calles. La expectativa para este año es generar ingresos de R$ 500 millones con la exportación de servicios de ingeniería para mercados globales.
“Estamos demostrando que invertir en desarrollo de tecnología e inteligencia automotriz es un negocio rentable, pero requiere una estructura de desarrollo y pruebas con profesionales altamente capacitados. Por eso, Tatuí representa un diferencial competitivo y estratégico para Ford en Brasil y en el mundo”, dice Rogelio Golfarb, vicepresidente de Ford Sudamérica.
El Centro Tatuí ocupa un área total de 4,66 millones de m2, de los cuales 3,63 millones de m2 son áreas verdes preservadas, con árboles nativos y más de 360 especies de animales.
Sus 40 km de pistas de tierra y 20 km de pistas asfaltadas incluyen zonas de alta y baja velocidad con diferentes tipos de pavimento y trazados, como arena, grava, piedras y barro, además de badenes, obstáculos, depósito de transposición de agua y rampas con hasta 40º de inclinación.
El sitio, que atiende a diferentes segmentos, además del sector automotriz, está preparado para realizar más de 440 tipos de pruebas, como evaluación de durabilidad, calibración, desempeño y seguridad, además de la homologación. Desde el inicio de sus actividades, se han recorrido más de 250 millones de kilómetros por sus vías, el equivalente a más de seis vueltas alrededor de la Tierra.
Los laboratorios de emisiones, desmontaje y análisis de piezas (Teardown), dinamómetro de motores, vibroacústica y simulador de carretera para evaluación de suspensiones (4Poster) están equipados para realizar más de 400 ensayos, cumpliendo con la legislación y normativa nacional y autonómica.
También hay áreas de apoyo, con garaje experimental, montaje de prototipos, almacén y estación de combustible, así como cargadores para vehículos eléctricos, incluido uno ultrarrápido de hasta 60 kW DC y 43 kW AC.
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