El cronógrafo automático con ratrapante RM 65-01 McLaren W1

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Richard Mille ha presentado el RM 65-01 McLaren Automatic Split-Seconds Chronograph W1, la cuarta creación surgida de su asociación con la empresa británica de superdeportivos de lujo y deportes de motor de élite, McLaren.

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El nuevo superdeportivo McLaren W1 que inspiró al RM 65-01 es el sucesor innovador de dos de los mejores superdeportivos de todos los tiempos: el McLaren F1 (1992) y el McLaren P1 TM (2013), y eleva el linaje de los coches McLaren “1” a nuevas alturas en todos los aspectos del rendimiento.

El encargo del RM 65-01 McLaren W1 requería que el reloj reflejara las características de vanguardia y alto rendimiento del automóvil en términos de forma, materiales y funcionalidad, así como el “motor” que lo impulsa. Este desarrollo resalta los valores compartidos que han dado vida a la asociación: superar los límites del rendimiento, impulsados por la pasión y la conexión humana.

EL MOTOR DEFINITIVO PARA EL RELOJ DE CONDUCCIÓN DEFINITIVO

Richard Mille eligió impulsar el RM 65-01 McLaren W1 con su movimiento de cronógrafo automático de más alto rendimiento, el RMAC4, que late a una velocidad apropiadamente alta de 5 Hz o 36.000 vibraciones por hora.

Esta alta tasa de oscilación permite que el calibre del cronógrafo de fracción de segundo registre tiempos transcurridos con una precisión de solo una décima de segundo, mientras que el embrague vertical del movimiento y las dos ruedas de seis columnas garantizan una activación precisa y ultra suave del cronógrafo.

También en el tema de la velocidad, el movimiento del RM 65-01 McLaren W1 (que se asienta sobre gomas de montaje del chasis en lugar de estar asegurado por un anillo de caja convencional) presenta un sistema de ‘cuerda rápida’ que permite recargar completamente la reserva de marcha de 60 horas en poco tiempo utilizando el pulsador especial hecho de cuarzo TPT® naranja.

Y, en consonancia con el principio de “rendimiento en todas partes” de McLaren, que garantiza que el W1 sea el superdeportivo definitivo, el RM 65-01 McLaren W1 también es perfecto para el uso diario gracias a la robustez incorporada del movimiento de 480 piezas y a su rotor de cuerda de geometría variable que se puede ajustar al estilo de vida del usuario. La vista a través del cristal permite apreciar plenamente el tratamiento de electroplasma gris de la platina de titanio de grado 5, junto con el PVD negro y los puentes de titanio de grado 5 con tratamiento de electroplasma gris.

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Respecto al desarrollo del calibre RM 65-01, Salvador Arbona, Director Técnico de Movimientos de Richard Mille, afirmó: “Este proyecto ilustra perfectamente la filosofía de Richard Mille de superar constantemente los límites técnicos para crear relojes innovadores que incluyan los últimos avances en relojería con un enfoque funcional, práctico y de alto rendimiento”.

CARROCERÍA A MEDIDA: EL RM 65-01 McLAREN W1: UN RELOJ COMO NINGÚN OTRO

Así como el McLaren W1 está diseñado para ser el superdeportivo más avanzado y centrado en la marca hasta la fecha, el reloj que lo complementa es uno de los técnicamente más complejos de todas las “Máquinas de carreras en la muñeca” de Richard Mille.

La caja de carbono TPT® de 43,84 x 49,94 x 16,19 mm del RM 65-01 McLaren W1 envuelve el movimiento de cronógrafo automático de fracción de segundo del reloj, al igual que la carrocería del W1 envuelve su motor y sus ocupantes, y se inspiró en las líneas del automóvil.

Al principio de la fase de desarrollo del W1, el equipo creativo de Richard Mille dirigido por Cécile Guenat, directora creativa y de desarrollo, tuvo acceso exclusivo a las primeras maquetas de arcilla del W1 para inspirarse en su forma, y decidió que una vista del coche desde arriba sería el punto de partida.

El sorprendente diseño del W1, construido alrededor de la exclusiva arquitectura “aero-cell” de McLaren, dio lugar al bisel “doble” con sangría del RM 65-01 McLaren, que planteó uno de los mayores desafíos técnicos en la creación del reloj.

El bisel Carbon TPT®, inspirado en la forma compacta y musculosa del W1, se asienta sobre un segundero de titanio de grado 5 pulido y con acabado satinado, lo que demuestra una ingeniería avanzada. Sus almenas revelan la banda de la caja Carbon TPT®, lo que añade profundidad y enfatiza los contornos del reloj. Se necesitaron nueve meses de trabajo (durante los cuales se experimentaron ocho diseños de prototipos).

El bisel superior tiene un grosor de tan solo cinco décimas de milímetro en su punto más fino, lo que lo convierte en el bisel más fino que Richard Mille haya fabricado jamás.

La marca también ha desarrollado un nuevo diseño de esfera de titanio esqueletizado basado en los patrones de las llantas de McLaren y que resalta sutilmente los detalles con colores que son sinónimo de la marca, evocando la sensación del salpicadero de un superdeportivo y, lo que es más importante, mejorando la practicidad del reloj en su uso.