Alemania también pone la puntilla al motor de ciclo diésel
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En una histórica decisión, el Tribunal Federal de Leipzig, en Alemania, ha respondido a la solicitud introducida hace algún tiempo por el Tribunal Administrativo de Alemania y ha autorizado a los ayuntamientos (gobernaciones) de ese país a vetar o limitar el uso de vehículos con motores diesel en las ciudades con más tráfico vehicular y/o con mayores niveles de polución ambiental.
La decisión es de tipo unilateral y autónoma, es decir, no se requiere para su implementación la sustentación sobre alguna otra ley, ni tampoco obliga a respetar la normativa ambiental vigente, que en la práctica queda derogada en los términos afectados por esta decisión tomada en Leipzig.
Medios especializados añaden que la medida afectará a casi trece millones y medio de unidades diesel, que actualmente circulan legalmente en Alemania. En total el parque local de automóviles diesel es de 17.6 millones de unidades, pero 2.6 millones son de producción reciente y respetan la norma ecológica Euro6, quedando exentos de la limitación de Leipzig.
Las estadísticas informan que actualmente los niveles de polución ambiental registrados en Alemania están siendo “preocupantes” en consecuencia con el “incremento de la cantidad de vehículos en circulación”.
Un reciente informe reveló que setenta ciudades alemanas están registrando niveles de concentración de óxido de nitrógeno superiores a los mínimos actualmente permisibles.
La Oficina Federal del Medio Ambiente informó desde Munich, Alemania, que diversos estudios revelaron que el 70% de las emisiones de nitrógeno que afectan al ambiente “son generadas por vehículos automotores con motores de ciclo diesel”.
La normativa no supone que las alcaldías, gobernaciones y ayuntamientos alemanes tendrán la potestad de desincorporar los 13.7 millones de unidades diesel inculpadas por ser excesivamente contaminantes. Pero sí están obligados a desarrollar programas que las hagan generar emisiones dentro de los límites permitidos.
Los directos afectados por la norma no serán los fabricantes de estos vehículos, sino sus actuales propietarios, quienes tendrán que hacerles superar test de emisiones de escape más exigentes.
Publicaciones especializadas han señalado que el costo de un sistema especial que incluya una sonda, un catalizador de mayor capacidad y una reprogramación del mapa motor para hacer que cualquier automóvil diesel con menos de diez años de edad pueda superar las normas ambientales Euro6 debe rondar los 1.200 dólares.
Algunos informes han alertado que en el caso de vehículos utilitarios, miniautos y subcompactos con más de cinco años de edad “añadir un equipo anticontaminación que supere la norma Euro6 a un costo de 1.200 dólares podría superar el precio de ese carro en el mercado de ocasión” por lo cual proponen que la aplicación de restricciones sea en paralela con un plan de renovación del parque automotor que ofrezca al automovilista incentivos en la compra de un carro nuevo por hasta esa cantidad a cambio de achatarrar su auto actual. (Flash del Motor).