Brasil: Después de 10 días de parada, Honda reanuda la producción el jueves
La empresa admite problemas con la falta de repuestos, pero dice que las vacaciones colectivas en julio ya estaban previstas en el cronograma anual, según una publicación de Auto Industria.
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Como otras automotrices instaladas en el país, Honda también admite problemas de falta de repuestos, lo que generó paros temporales en sus líneas de producción en las plantas de Sumaré e Itirapina, en el interior de São Paulo, entre el 9 y el 11 de junio. Ahora en julio, la empresa otorgó diez días de vacaciones colectivas en las dos unidades, con suspensión de operaciones el lunes 5 y regreso programado para este jueves 15.
La automotriz informa que son vacaciones colectivas regulares dentro del cronograma programado para 2021, sin atribuir el paro de este mes al impacto de la pandemia Covid-19 en la cadena de suministro, que viene afectando al sector a nivel mundial debido a la escasez, principalmente, de semiconductores.
Entre las automotrices con líneas actualmente afectadas por este problema se destaca General Motors, que desde el 5 de abril suspendió operaciones en Gravataí, RS y Volkswagen, que decidió suspender la producción en Taubaté, SP, por 20 días a partir del pasado lunes 12. En el caso de su fábrica en São Bernardo do Campo, en ABC paulista, se otorgarán vacaciones colectivas por turno también por 20 días a partir del próximo lunes 19.
A pesar de los inconvenientes que la falta de repuestos ha causado a los fabricantes de automóviles y también a las redes de concesionarios, que conviven con bajos inventarios y falta de productos para una pronta entrega, la escasez global de repuestos no tiene una solución prevista para el corto plazo.
Durante una presentación este miércoles 14 de una encuesta realizada por Webmotors sobre el comportamiento del consumidor en tiempos de pandemia, el presidente de Anfavea, Luiz Carlos Moraes, admitió una vez más que la industria automotriz debe seguir viviendo con la falta de componentes electrónicos para al menos otro año.
Esto significa, según él, que el riesgo de paros en la línea de montaje, ya sean ocasionales o por períodos más prolongados, debe continuar en este segundo semestre, con la continuidad del trabajo diario de los montadores en materia de logística y con los proveedores para evitar como máximo, mayor reducción de la oferta en los próximos meses.
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