El famoso circuito de Spa-Francorchamps cumple 50 años
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Los organizadores del Gran Premio de Bélgica, a realizarse a finales de agosto en el Circuito de Spá, delimitado entre las localidades de Spá, Stavelot y Francorchamps al norte del país, expresaron con gran entusiasmo que en la edición 2017 de evento celebraran medio siglo de la inauguración del trazado original en 1967.
En el pasado, el Gran Premio de Bélgica se ha realizado en localidades como Nivelles y Zolder, ambos circuitos cerrados, pero entre los varios trazados locales el más famoso es el de Spa-Francorchamps, que es de tipo rutero, es decir, usa tramos pertenecientes a la red vial de ese país, cotidianamente usados por los automovilistas.
Parte del encanto de Spá Francorchamps tiene que ver con la espectacular curva rápida en subida Eau Rouge y el no menos espectacular tramo de aceleración pura de Kemmel, que siguen ofreciendo un gran atractivo aunque en los últimos años se ha hecho cada vez menos retador recorrerlos a plena aceleración.
El tributo incluirá a varios de los pilotos que desde 1967 han ganado carreras de F-1 en Spá Francorchamps y también tomará en cuenta el uso de este circuito para organizar la prestigiosa prueba de “24 horas de Spá”, uno de los eventos más importantes en las categorías de autos turismo y de GT.
También el tributo incluirá a Michael Schumacher, quien vivía a menos de 100 kms de Spa cuando debutó en el Campeonato del Mundo de Fórmula 1, justamente en este trazado, en septiembre de 1991. Schumacher ganó seis veces el GP de Bélgica en Spá, la primera de ellas en 1992. Los organizadores prometieron hacer exhibiciones en pista con varios de esos autos, incluyendo los Benetton B192 Ford y B195 Renault que el alemán tripuló para imponerse en 1992 y 1995.
“Tendremos una zona especial para fanáticos mucho más espectacular que antes, con un tamaño tres veces mayor”, dijo el organizador del evento, Andreas Maes, quien además anticipó la realización de desfiles especiales y la presencia de varios importantes pilotos belga, incluyendo a Thierry Boutsen, que se mantuvo activo en F-1 hasta inicios de los años ’90.
“Será una ocasión especial, porque también tendremos a un belga compitiendo, a Stoffel Vandoorne y estará Max Verstappen, que también nació aquí”, añadieron los voceros del evento.
Para el calendario de la F-1, Bélgica tiene un significado especial por el paisajismo de la zona circundante al trazado de Spa, pero también porque marca el final de la pausa veraniega de la categoría y representa para muchos el inicio de la segunda mitad del Campeonato, aunque en realidad es la 12ª prueba de las veinte que integran el calendario 2017. (Flash del Motor).