Mary Barra reafirma su poder al frente de General Motors
Los accionistas de General Motors (GM) rechazaron esta semana la propuesta de crear dos tipos de acciones que proponía Greenlight Capital, un fondo de inversiones que posee una participación del 3,6% en el más importante fabricante estadounidense de vehículos.
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La iniciativa suponía crear un tipo de acciones de la que dependiera el dividendo a pagar y una segunda que dependería de los beneficios generados. David Einhorn, el Presidente de Greenlight Capital, insistió en que con la duplicidad de las acciones se reducirían los costos de capital y podría mejorar la valoración bursátil de GM. Desde hace meses se ha mostrado muy crítico con el bajo precio de las acciones del fabricante, que ayer cotizaban a 34,6 dólares.
Sin embargo, Einhorn debía tener claro que su propuesta sería derrotada porque no asistió a la asamblea de accionistas. Ésta no sólo la rechazó por un 91% de los votos. También se opuso a sus tres candidatos para ocupar uno de los nueve puestos de directores independientes de que consta el Consejo de Dirección de GM que, una vez más, será presidido por Mary Barra, que también será la presidenta ejecutiva.
Barra aseguró que la empresa se está esforzando por llevar a cabo acciones que maximicen el retorno respecto a la inversión y consoliden el valor a largo plazo para los accionistas.
Lo que sorprende es que algunas de las decisiones de la compañía suponen un repliegue de mercados tan importantes como el europeo, tras la venta de Opel y la retirada de Chevrolet, y el de India; o la reducción de efectivos de su cuartel general de Asia-Pacífico, situado en Singapur. Parece como si hubiera decidido centrarse en las regiones más rentables: EEUU y China. (Flash del Motor).
