Más plantas se detuvieron en Europa
Las restricciones al movimiento de personas, materiales y la falta de componentes interrumpen la producción en varios países.
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Ni siquiera el mítico Ferrari y su producción casi artesanal pudieron soportar el brote de coronavirus y la falta de componentes. El fabricante de los autos deportivos más famosos del mundo detuvo la producción en sus dos fábricas durante al menos dos semanas.
Ferrari fue una de las pocas compañías que aún se arriesgaba a mantener cierto nivel de actividad la semana pasada en Italia, cuando FCA, el mayor productor de vehículos en el país, ya había decidido desactivar temporalmente las máquinas y mantener a tantos empleados en casa como sea posible de sus cuatro plantas locales.
Sin embargo, el sábado (14), Ferrari admitió que a las unidades de Maranello y Módena ya les faltaban piezas, lo que ya no permitiría la producción continua. La compañía dice que las actividades administrativas o de cualquier otra índole que puedan realizarse de forma remota continuarán.
Pero la interrupción en la producción de unos pocos cientos de autos súper deportivos es una parte muy pequeña de las dificultades que enfrenta la industria automotriz europea.
Las marcas de gran volumen en varios países comenzaron la semana a un ritmo lento o, en la mayoría de los casos, sin ningún nivel de producción. Algunos admiten que ni siquiera saben cuándo podrán volver a cablear las líneas de montaje.
Volkswagen ha suspendido la producción en su complejo de Bratislava, Eslovaquia, la base de SUV y automóviles de VW, Porsche, Audi, Skoda y Seat. “Esperábamos que la situación del coronavirus se calmara durante el fin de semana, pero no fue así”, dijo Oliver Grunberg, presidente de Volkswagen Eslovaquia.
Después de anunciar la interrupción en Italia, el lunes (16) la FCA extendió las restricciones de trabajo de otras unidades europeas: Kragujevac, en Serbia, y Tychy, en Polonia, tampoco producirán en los próximos días.
Además de proteger a los empleados, la compañía dice que la medida temporal adapta la producción “a la interrupción de la demanda del mercado, asegurando la optimización de la oferta”. Con muchos concesionarios cerrados en varios países, la industria europea se está preparando para una marcha con niveles de ventas muy por debajo de lo normal.
El movimiento restringido de personas y bienes, y la escasez de componentes, también son una realidad en otros países europeos.
La escasez de autopartes llevó a Ford, Renault y Seat a anunciar una interrupción temporal de la producción en España. Ford mantendrá la planta de Valencia cerrada hasta el 23 y en Seat, dicen los líderes sindicales, el cierre podría durar dos meses, a pesar de que el fabricante de automóviles no ha revelado una fecha límite.
La agencia de noticias France Presse ha escuchado de una fuente sindical que asegura que PSA comenzará a suspender el trabajo al menos tres de sus unidades en Francia esta semana. (Auto Industria).