Recordando el día en que Schumacher ganó su primer título

Schumacher Titulo 1
Compartí este artículo!

Schumacher Titulo 1

Recibí las noticias en tu celular: Canal de WhatsApp Motorpy

Los servicios de prensa del Campeonato del Mundo de Fórmula 1 han difundido en las últimas horas diversos recordatorios audiovisuales que recuerdan el Gran Premio de Australia de 1994 y, en concreto, la definición del duelo que en esa carrera protagonizaron el alemán Michael Schumacher y el británico Damon Hill por el título mundial de automovilismo Fórmula 1.

Aquella carrera cerraba con muy buen ambiente una temporada que en realidad había sido dramática, debido a las polémicas iniciales sobre los cambios al Reglamento Técnico que suprimían las ayudas al piloto y luego por el trágico accidente del brasileño Ayrton Senna que conmocionó al ambiente y al mundo en general.

A lo largo de 1994 el dramatismo traído por la muerte de Senna y la paranoia consecuente en temas de seguridad en pista fue paralela con las suposiciones relativas al comportamiento ilegal de Michael Schumacher y el equipo Benetton, a quienes se les atribuía el uso ilegal de sistemas de ayudas al pilotaje, maniobras dudosas en pista y otras ilegalidades como la manipulación de los sistemas de repostaje de gasolina.

Todas estas sospechas trajeron polémica y el alemán, Reglamento en mano, debió haber sido sancionado con la exclusión del Campeonato, pero a nadie se le ocurrió ahondar en esos términos para no crear más polémicas en una categoría que ya estaba bastante convulsionada.

Así, Schumacher siguió usando tecnología ilegal y siguió cometiendo irregularidades que merecían penas mucho más severas que la descalificación en el GP de Gran Bretaña por superar al pole man en la vuelta de presentación, la descalificación en Bélgica por haber su equipo ajustado su carro mucho más bajo de lo que permitía el Reglamento y la suspensión en las carreras de Portugal e Italia cuando ya era demasiado obvio el uso de tecnología ilegal.

banner

Hill, entre tanto, había hecho un gran trabajo renovando la moral de un equipo espiritualmente destruido por el fallecimiento de Senna. Aquel carro indomable que le había costado la muerte al brasileño (quien pereció en el intento imposible de mantenerse por delante de Schumacher a sabiendas de que éste usaba tecnología legal) recibió gracias a las indicaciones de Hill las modificaciones necesarias para hacerlo más dócil y consistente.

Publicidad
Perfecta

Sin el talento natural del alemán Schumacher y sin la competitividad que a éste le daba la presencia en su auto de tecnología ilegal, Hill fue hilvanando carreras buenas gracias a su persistencia. Ello, a la hora de hacer cuentas, colocó al inglés a un solo punto del alemán pese a la amplia ventaja técnica que éste tuvo.

Schumacher Titulo 2

En cierto modo, según los expertos, las descalificaciones impuestas a Schumacher compensaron frente a Hill las diferencias técnicas. Para la carrera final, en Adelaide, ambos se jugarían el título en unas extrañas condiciones de igualdad luego de una temporada realmente desigual.

Nigel Mansell, compañero ese día de Hill en el team Williams, logró la pole en Adelaide pero respondió con acritud a todos los periodistas que sugirieron que podía aprovechar su situación para favorecer a Hill (y a las aspiraciones británicas del título) frente a Schumacher. El inglés simplemente hizo lo más deportivo: se apartó y dejo que Schumacher y Hill decidieran entre ellos, y sin interferencias, el título mundial.

En Adelaide la imagen de invencibilidad mostrada por Schumacher durante todo 1994 fue un espejismo y el alemán se mostraba cada vez más a la merced de un Damon Hill con menos talento natural, pero con mucho empuje. Fue la presión de Hill la que llevó a Schumacher a cometer un error, saliéndose de pista y golpeando el muro lo suficientemente fuerte como para dañar su carro. Al intentar Hill superarlo, Schumacher simplemente aprovechó esa última oportunidad para embestir al rival y dejarle fuera de carrera también.

Los analistas reprocharon en ese momento a Hill no haber esperado para superar a Schumacher, pero en ese momento el inglés no sabía que el carro del alemán había quedado demasiado dañado y simplemente intentó el pase, creyendo que simplemente se había salido de pista y que él debía aprovechar esos brevísimos instantes en los que el alemán debía recuperar el ritmo con ruedas sucias. Obviamente tampoco Hill esperaba que, en plena gesta deportiva, su rival se defendiera con un gesto antideportivo…

El choque de Schumacher a Hill dañó el auto de éste, impidiéndole terminar la carrera e impidiéndole colmar esa ventaja de un solo punto que a la postre dio al alemán el primero de sus títulos. Los especialistas reconocieron la ilegalidad de la maniobra de Schumacher, pero había demasiada polémica como para echar leña al fuego pretendiendo descalificar a Schumacher por aquello.

La gran consolación para Hill y para sus fans llegó con los años, cuando fue admitiéndose de manera cada vez más abierta la ilegalidad de aquella maniobra y lo fraudulento de aquel título.

Y eso es toda una lección de valores: es mejor una derrota deportiva que una victoria a través de medios y valores inapropiados. (Flash del Motor).

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *